Tarifas de móviles para todo tipo de usuarios
Si hay algo que se agradece a un operador de telefonía e Internet es el hecho de que tenga una gran variedad de tarifas para poder escoger la que se adapte a las necesidades de cada casa y a cada situación. Un buen ejemplo en este sentido son las mundo r tarifas que ofrecen prácticamente todas las alternativas para sus clientes:
-Los paquetes más completos. Los paquetes más completos de R ofrecen televisión, Internet, teléfono fijo y también teléfono móvil, incluso varias líneas para poder juntar las de toda la familia. Incluso permite comprar teléfonos móviles y pagarlos en veinticuatro cuotas, con descuentos que dependen de las tarifas contratadas.
Una de las ventajas que ofrecen es que cada móvil puede tener sus propias tarifas y que se pueden comprar paquetes de datos una vez que se acaban, por lo que si un mes hacen falta más datos de manera circunstancial, no te vas a quedar sin ellos.
-Los paquetes más sencillos ofrecen, por ejemplo, tan solo Internet para el hogar. Pocas compañías ofrecen exclusivamente Internet ya que el precio del teléfono fijo prácticamente no supone gasto extra. Pero se han dado cuenta de que en pisos compartidos, esta es una demanda que había ya que no quieren que haya la posibilidad de que se pueda usar un fijo para llamar a números con coste que acaben repercutiendo en un gasto general.
Cada vez son más las personas que no usan el teléfono fijo ya que tienen un móvil con tarifa plana que es el que usan para todas sus llamadas. No obstante, en el hogar se sigue usando un teléfono fijo precisamente porque no compensa no contratarlo, pues el precio es prácticamente idéntico. Pero para los que están mucho tiempo en casa, sin duda compensa tener un teléfono fijo, sobre todo porque suelen tener muchos minutos gratis en llamadas a móviles. Bien utilizados, se puede ahorrar la tarifa plana del móvil y cambiarla por una de minutos más económica.
Entre los paquetes más completos y los más sencillos existen toda una serie de opciones que se pueden adaptar a las necesidades de cada hogar, por ejemplo la velocidad a la que se quiere recibir Internet o el tipo de tarifas para móviles que van desde las tarifas planas totales para quienes no quieren medir el gasto de sus llamadas, hasta los paquetes de minutos para los que son menos habladores.