Hay cosas que planeamos casi por casualidad y que pueden acabar cambiándonos totalmente la vida. Es el caso de una escapada que puede empezar mirando una camper asturias alquiler y que puede hacer que nuestras vacaciones nunca vuelvan a ser las mismas. Pero, ¿cómo puede cambiarte la vida una escapada en camper? Pues puede abrirte los ojos a una manera diferente no solo de viajar, sino también de entender la vida. Una forma de disfrutar del ocio que no entiende del estrés y de las prisas y con la que aprenderás a escuchar tus propios deseos y a complacerlos en lugar de aplazarlos.

Para empezar, vas a descubrir una nueva manera de viajar, en la que el reloj ya no formará parte de tu vida. No tendrás que mirar la hora ni estar pendiente de llegar a un lugar determinado para poder ir al hotel. O levantarte temprano porque hay que dejar la habitación antes de las 12 de la mañana. Tú serás el único responsable de tus horarios y nadie te los marcará ni decidirá cuándo tienes que marcharte o llegar a tus destinos.

Tampoco tendrás rutas diarias ni objetivos. Porque estar de vacaciones no tiene que ser una prueba de resistencia. Si un lugar te gusta, puedes quedarte más de lo inicialmente previsto porque nadie te echará en cara que no tengas reserva, solo tienes que aparcar tu camper y dormir sin más problemas. Y si por el contrario el sitio no es lo que esperabas, puedes cambiar tu destino inmediatamente, sin problemas por el hecho de tener una reserva que te ves obligado a pagar tanto si usas como si no usas la habitación.

Descubrirás el placer de ir conduciendo y sentir ese sueño que a veces nos entra al mediodía tras una buena comida. Parar en un área de servicio, ir a la parte de atrás, y acostarte para disfrutar de una buena siesta hasta que el cuerpo te indique que es el momento de continuar. O dormir toda la noche en un lugar idílico que has descubierto, tras haber cenado mirando un cielo lleno de estrellas porque la contaminación lumínica no existe en ese paraíso. Incluso podéis aparcar y sacar los sacos de dormir para disfrutar del aire durante la noche y dormiros viendo cómo brillan las estrellas, para ser despertados por el sol al amanecer.