¿Pueden las Cíes ser las míticas Casitérides?
Hubo un tiempo muy lejano, en la llamada Edad del Bronce, en el cual el estaño era un material de gran valor. El bronce era el metal más usado para fabricar utensilios de todo tipo, pero en especial para la fabricación de armas. Y este metal es fruto de la aleación del cobre y del estaño.
En aquel entonces, las civilizaciones más importantes florecían en la zona de Mesopotamia y Mediterráneo Oriental y eran estas las que más bronce consumían. Entre estas civilizaciones había dos que destacaron por se excelentes navegantes: los fenicios y los griegos, precedidos estos por los micénicos. Estos navegantes realizaron largas rutas por el Mediterráneo buscando nuevos mercados y uno de los productos que más ansiaban era el estaño, por los motivos comentados.
Se cree que las navegaciones les llevaron hasta el final del mundo conocido, marcado por las llamadas Columnas de Hércules, como llamaban al Estrecho de Gibraltar. Pero no se conformaron con eso y fueron más allá subiendo por las costas de Portugal, buscando siempre el estaño con el que nutrir su industria metalúrgica.
Las fuentes clásicas nos hablan de las islas Casitérides, a donde llegaron en su búsqueda. La localización de estas islas míticas ha sido el objetivo de muchos estudiosos y arqueólogos que las han situado en las costas de Cornualles, en Inglaterra o incluso en Escocia. Pero también hay quién cree que pudieron ser las islas gallegas y debido a esto darse un proceso de colonización de las Islas Cíes.
¿Pueden las Cíes haber sido las míticas islas Casitérides de las que han hablado tantos clásicos? Los estudios de los arqueólogos y geólogos parece que desmienten esta hipótesis pues no son suelos especialmente ricos en este material, como tampoco lo son algunas de las otras localizaciones propuestas. Pero, en los últimos tiempos, hay una teoría que está cogiendo fuerza por parte de los expertos: las Casitérides no eran en realidad unas islas, eran una ruta, la ruta que realizaban los barcos para buscar el estaño en diferentes puntos de Galicia y de las Islas Británicas.
De ser esto cierto, las Cíes estarían dentro de esa ruta y podrían haber sido un lugar de parada para estos viajeros aventureros, donde descansar y coger fuerzas. La próxima vez que visites las islas, piensa en que quizás, hace tres o cuatro mil años, unos intrépidos comerciantes estuvieron justo donde estás tú ahora, en medio de una aventura para conseguir estaño.