¿Por qué necesitamos tantos seguros?
Vivimos rodeados de seguros: el de salud de adeslas seguro, el de hogar, el del coche, el seguro de vida o incluso un seguro de responsabilidad civil para nuestros animales. ¿Son excesivos? ¿Está justificado lo que gastamos en seguros a lo largo del año? Para responder a esta pregunta solo tenemos que imaginar qué pasaría si no tenemos contratados estos seguros y necesitamos alguno de los servicios que nos ofrecen:
-El seguro del coche es obligatorio, al menos el conocido como seguro de terceros. Pero imagina que fuera optativa su contratación y que, por un despiste, tenemos un accidente con otro coche. No vamos a pensar en que haya desgracias como una muerte, pero podemos pensar en un golpe que suponga un daño para el vehículo y que la persona al volante tenga un esguince cervical que le impida trabajar durante un tiempo. La factura del taller podría fácilmente superar varios cientos de euros, pero en el caso de los daños personales, podríamos tener que pagar la indemnización por el tiempo que no va a poder trabajar la persona, las pruebas médicas a las que se le someta e incluso la rehabilitación en una clínica de fisioterapia. ¿Te imaginas la cantidad que podría llegar a suponer? Y todo esto sin pensar en que se vaya a juicio y nos pidan otro tipo de indemnizaciones.
-El seguro de la vivienda puede suponer un importe de entre doscientos y trescientos euros para un piso de tamaño normal. Pero imagina que una tubería rompe en tu hogar y cae agua al vecino de abajo. Te tocaría pagar al fontanero que encuentre en dónde está la fuga, los daños que se produzcan en el suelo o las paredes de tu casa para poder arreglar la tubería pero también indemnizar a tu vecino. En ocasiones, puede ser solo pintar el techo de la vivienda, pero si el agua ha estropeado muebles o electrodomésticos, te tocará reponerlos. La factura podría fácilmente multiplicar por diez lo que pagas de recibo anual de seguro.
-Los seguros de salud son los que se consideran más prescindibles porque contamos con seguridad social. Pero a veces queremos realizarnos pruebas antes para poder acceder antes a los tratamientos. Una consulta a un especialista puede superar los cien euros y cualquier prueba va a suponer una cantidad bastante superior a esa. Y eso acudiendo tan solo por una causa al médico.