Muchas empresas se han especializado en la fabricación de mascarillas tras el comienzo de la pandemia por Covid-19. En un principio, fue la necesidad de mascarillas, que no había en el mercado, la que llevó a muchas empresas a reciclarse y comenzar a fabricar mascarillas de tela. Pero con el paso del tiempo, las mascarillas personalizadas para empresas, partidos políticos e incluso para gobiernos, se ha convertido en un negocio en auge.

Para empezar, se busca un diseño atractivo y en el que destaque de forma más o menos llamativa el logo de la empresa o de la organización. Se completa el conjunto encargando a un fabricante de Cinta elástica personalizada cinta en un color exactamente igual al de la mascarilla y que en algunos casos puede tener el dibujo del logo.

Hemos visto estas mascarillas en campañas electorales, en funcionarios de diferentes sectores, en comercios… una forma de promocionar los negocios y también de conseguir que los empleados públicos o de empresas privadas tengan una imagen corporativa más homogénea. Se evita así que en algunos lugares los empleados acudan a trabajar con mascarillas que pueden resultar poco adecuadas, ya sea porque no son seguras del todo ya sea porque son estéticamente discutibles.

Muchas empresas se ven obligadas a entregar a sus empleados mascarillas y han descubierto que encargar mascarillas personalizadas de tela, de buena calidad y con una buena apariencia, no solo les resulta más barato, ya que con dar unas pocas unidades cada mes cumplen con su obligación, sino que además son una gran propaganda para su negocio ya que muchos clientes también las quieren.

Al ser algo que todos llevamos durante todo el día, las mascarillas se han convertido en parte de nosotros y por eso también muchos compran mascarillas personalizadas para disfrutar de modelos únicos, originales y que combinen con sus prendas de moda, convirtiéndolas así en un complemento más. Muchas tiendas de moda han fabricado mascarillas con sus logos y en tiendas de ropa encargan mascarillas que combinan con muchas de sus prendas para que sus clientes puedan ir totalmente a juego.

Dado que las mascarillas todavía estarán con nosotros durante un tiempo, incluso hay quién dice que han llegado para quedarse, podemos decir sin temor a equivocarnos que el negocio de las mascarillas personalizadas no solo está en auge, sino que seguirá siendo rentable durante los próximos meses al menos.