Los estores más cómodos para la habitación de tu hijo
Existen muchos sistemas de estor para dormitorio. Los más elegantes son los estores paqueto, que recogen la tela arrugándola sobre sí misma de una forma muy original y bonita. Son perfectos para dormitorios de adultos, ya que para que la tela quede perfecta tiene que ser delicada y muy manejable, como una seda, un lino fino o similar.
Pero para las habitaciones de los niños es mejor optar por otros sistemas que sean más sufridos y que permitan el uso de telas que no resulten demasiado delicadas. Si tu hijo es un adolescente ya y es cuidadoso con las cosas, puedes optar por unos estores de láminas plegables. Son similares, en su forma de funcionar, a las persianas venecianas y permiten el uso de telas muy diferentes.
Pero tienen el inconveniente de que para limpiarlos hay que desmontar las láminas del interior de la tela y esto da un poco de trabajo. Por lo que si tu hijo es de los que no tienen excesivo cuidado o es muy pequeño, es mejor un sistema que permita un lavado mucho más frecuente. Por ejemplo, los estores enrollables. Estos son prácticos y se limpian con un paño ligeramente humedecido, por lo que siempre se va a ver perfectos sin mucho trabajo.
También tenemos los estores con velcro. Estos son ideales para dormitorios en los que la caja de la persiana es exterior y queda a la vista. Solo hay que poner una tira de velcro en esta caja y sobre la misma se pega la tela del estor. Incluso si la caja es cuadrada, el estor puede cubrir también los laterales. Quitar y poner este tipo de estores no puede ser más fácil, ya que se despegan tirando y se pueden poner y quitar tantas veces como se desee. El sistema de retirada del mecanismo es igual que en los estores con riel y si la tela escogida es sufrida, puede lavarse con la frecuencia que se quiera.
Este tipo de estores, al igual que las cortinas, no tienen que secarse ni plancharse si la tela tiene suficiente peso ya que con colgarlos húmedos y dejar que sequen totalmente estirados, suelen quedar perfectos. En algunos casos, con un pequeño toque con una plancha vertical es suficiente para que cualquier pequeña arruga que pueda haber quedado desaparezca y vuelvan a verse impecables y bonitos.