EXPROPIAR PARA ARREGLAR
Ya era hora de que los ayuntamientos empezasen a expropiar los edificios que están en ruinas desde hace un montón de años y que sus propietarios o no podían o no querían arreglar, pero hay muchos edificios que necesitaban unas reformas integrales de manera urgente. Hay ciudades que tienen barrios por los que da verdadera pena pasar por ellos, ya que muchos de sus edificios están en un estado verdaderamente calamitoso. Y los ayuntamientos hacen bien expropiando esos edificios que están en estado ruinoso y arreglándolos ellos mismos, ya que tener edificios en ruinas por la ciudad afean mucho la ciudad. Además muchos de estos edificios en ruinas son edificios arquitectónicamente mucho más hermosos y que se están desaprovechando y dejando que se pudran. El espacio en las ciudades no es que sobre para dejar de lado a edificios que podrían albergar a muchas familias que a lo mejor les cuesta encontrar una vivienda donde poder vivir, arreglando estos edificios abandonados se vuelve a ganar el espacio que se había perdido con anterioridad. Arreglar los edificios abandonados es importante para que la arquitectura antigua no desaparezca, ya que por norma general la arquitectura antigua suele ser mucho mejor que la arquitectura actual, y conservar los edificios antiguos es beneficioso para la ciudad. Además, por lo general las viviendas de los inmuebles que son arreglados por los ayuntamientos son alquilados a gente que de verdad lo necesita y no a gente que ahora que el edificio está arreglado les parece un buen sitio para vivir, lo que me parece de lo más correcto, los ayuntamientos tienen que estar para ayudar a los ciudadanos que de verdad lo necesitan y no a los ricos que no lo necesitan. Y no solo es necesario arreglar los viejos inmuebles abandonados para recuperar en terreno que la ciudad había perdido sino también para sanear la zona, ya que por lo general donde hay edificios abandonados suele haber flora y fauna que no es muy aconsejable ni beneficioso en las ciudades. Esperemos que dentro de poco ya no queden tantos edificios en ruinas en nuestras ciudades.